La aventura de emprender un negocio

Crear una empresa y emprender un negocio no es una tarea nada fácil. Suele ser un proceso poco conocido para la mayoría de emprendedores; y produce, en la mayoría de los casos, una sensación de inquietud y miedo a lo desconocido. Si, además, se lleva a cabo en solitario, aún se complica más. Por esta razón, Grupo Veigler Formación ha preparado una guía sencilla y completa que te ayudará a guiarte en tu decisión de emprender.

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Emprender en solitario

Una de las principales dudas que tienen los emprendedores es si realmente están preparados para lo que se les viene encima. Crear una empresa y hacerla crecer es un proceso: no se consigue de un día para otro y nadie asegura que el éxito será inmediato. Es normal cometer errores, fracasar y perder recursos por el camino. Pero de todo se aprende: con cada fallo sabremos a qué hay que prestar más atención y qué hay que mejorar la próxima vez.

Antes de emprender hay que informarse bien acerca de los trámites administrativos para la creación de empresas. Existen diversos tipos de forma jurídica: autónomos, sociedades civiles, anónimas, colectivas y limitadas, etc.; entidades de capital-riesgo y agrupaciones de interés económico, y muchas más. Las empresas, además, deben reunir una serie de licencias que validen la puesta en marcha de la misma. En el caso de España, podemos consultar esta información en la página web del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Es importante informarse bien de todos los requisitos y documentos necesarios; además de las ayudas e incentivos para la creación de empresas y los métodos de financiación de los que se puede disponer.

No se puede emprender sin una idea

El objetivo de un emprendedor es, a partir de una idea inicial, construir un proyecto empresarial que le permita introducirse al mercado, ya sea fabricando un producto u ofreciendo un servicio (o ambas). Por lo tanto, el primer paso para emprender es tener una idea. Y no vale cualquier idea. En la actualidad se dice que todo está inventado, aunque no es del todo cierto. Algunos emprendedores apuestan por iniciar “el negocio de su vida”, una idea que llevan tiempo meditando y que por fin deciden llevar a cabo. Sin embargo, otros emprendedores prefieren analizar el mercado y las necesidades de los consumidores, detectar oportunidades de negocio y crear un producto o servicio que cubra un nicho concreto.

Una vez escogida la idea, hay que elaborar un plan de negocio, que nos ayudará a:

• Decidir si la opción es viable.
• Valorar aspectos como las inversiones, ventas, gastos, etc.
• Modificar los elementos necesarios.
• Medir los progresos y los resultados.
• Elaborar planes de mejora.
• Disminuir la probabilidad de fracasar.

Algunos emprendedores optan por contar con un experto en administración y dirección de empresas que les asesore y guíe en sus primeros pasos.

Viabilidad de la idea

Para analizar la viabilidad de una idea y la probabilidad de éxito de una oportunidad de negocio, podemos hacernos las siguientes preguntas:

• ¿Qué ventajas ofrece el producto o servicio frente a lo que ya existe en el mercado?
• ¿Por qué los clientes van a escoger a la nueva marca antes que a su competencia?
• ¿Cuál es el valor añadido que proporciona el producto o servicio?
• ¿Quiénes pagarán por el producto o servicio?
• ¿Cuáles son las características de la competencia?
• ¿Dónde se comercializará el producto o servicio?
• ¿De cuánto será la inversión? ¿Se lo puede permitir?
• ¿Cuánto tiempo hay que invertir?

La financiación

Muchas personas no se atreven a emprender a causa del alto coste que supone crear, construir y mantener una empresa. En muchos casos, se acude a una entidad financiera para solicitar un préstamo, una póliza de crédito, microcréditos o factoring, entre otros. En España, podemos consultar las ayudas e incentivos en la página web mencionada con anterioridad o en el Departamento correspondiente de cada Comunidad Autónoma. También podemos crear una patente y solicitar su financiación a empresas privadas. En cualquier caso, es muy importante informarse en profundidad y valorar todas las opciones disponibles.

Networking

Una de las claves del éxito de los emprendedores es el networking. Acudir a eventos y congresos y participar en blogs, foros y conversaciones en redes sociales proporcionan nuevos contactos profesionales. Esta actividad permite obtener información, experiencia e inspiración de otras personas con tus mismos intereses. Entre las ventajas del networking destacan:

• Intercambiar experiencias con otros emprendedores o profesionales de diversos sectores.
• Aprender de los más experimentados.
• Obtener consejos e información de valor para el negocio.
• Entablar relaciones con socios y colaboradores.
• Aprender a trabajar en equipo.
• Cultivar habilidades sociales.
• Mejorar la toma de decisiones.