Todo lo que debes saber del coaching empresarial

Últimamente se habla mucho de coaching empresarial, de mindfulness, del bienestar en el trabajo… Pero, ¿qué significa realmente este concepto? ¿Aporta tantos beneficios como dicen? ¿Quién lo imparte? Estamos aquí para resolver estas dudas y más. Si regentas un negocio o tienes una empresa, probablemente te interese saber qué es. Te adelantamos que, gracias a las sesiones de coaching, la productividad y la motivación de todos los trabajadores, directivos incluidos, puede mejorar considerablemente.

Si has llegado hasta aquí probablemente te interese este tema, ¡así que sigue leyendo!

¿Qué es el coaching?

El coaching es una dinámica educativa que empuja a la persona que lo recibe a la autoreflexión y al empoderamiento personal. Mediante esta práctica, el cliente profundiza en su conocimiento y aumenta su rendimiento y desempeño en diversos aspectos de su vida. Las habilidades que se entrenan están relacionadas con el liderazgo y la comunicación.

El coach es el profesional que acompaña al cliente a lo largo de su desarrollo personal y profesional. El coach debe escuchar y observar cómo se expresa y cómo actúa el cliente, le plantea preguntas pero nunca ofrece él la solución. Es el coachee quien debe encontrar la respuesta por su propia cuenta.

Coaching empresarial

El coaching empresarial está enfocado a mejorar la comunicación en la empresa. Tanto a nivel horizontal como vertical, pretende mejorar la relación entre empleados, directivos y todo el personal interno de una empresa. Además, también busca motivar a los trabajadores así como potenciar las habilidades de cada uno para mejorar el rendimiento del equipo.

Es una práctica muy interesante y que puede mejorar en gran medida el desempeño de los profesionales. Si eres el líder de una organización o equipo, es conveniente que conozcas el estado de cada empleado en su lugar de trabajo. Si crees que el rendimiento laboral es bajo o que alguien necesita reforzar ciertas habilidades, puedes plantearte realizar alguna sesión de coaching que otorgue ese impulso que a veces falta.

¿Qué objetivos persigue?

• Busca orientar a los trabajadores en el desarrollo de sus habilidades, así como mejorar la comunicación interna en general.
• Pretende brindar al equipo las herramientas que ya poseen pero que no han sabido desarrollar.
• Plantea la mejora de la confianza entre los empleados para dar lugar a una mejor toma de decisiones. Asimismo, para que estos puedan sentirse identificados con su organización.
• Busca aumentar el compromiso de los empleados con la organización, así como el sentimiento de pertenencia. Ambos conceptos están estrechamente ligados con el aumento de la motivación y el rendimiento laboral.

¿Cuáles son sus beneficios?

1. Favorece el trabajo en equipo. Se fortalecen los lazos de unión entre el personal de una organización. Muchas veces se llevan a cabo dinámicas de grupo para empatizar con los compañeros y entender qué función desempeña cada uno de ellos.
2. Potencia el talento individual, ya que se exploran y explotan las habilidades y las capacidades de cada individuo. Combinándolas con las del resto del equipo, facilita el alcance de los objetivos propuestos y la mejora de los resultados.
3. Incrementa la creatividad y ayuda a generar inspiración y nuevas ideas. Al promover el autoconocimiento, las personas se enfrentan a situaciones diversas, lo que despierta su lado más resolutivo. Asimismo, mejora la adaptación a los cambios y prepara a los empleados para afrontar la innovación y la creciente competitividad.
4. Mejora la productividad y el rendimiento. Este es uno de los principales objetivos de esta dinámica.
5. Mejora el bienestar en el trabajo, favoreciendo la comunicación entre los trabajadores y la resolución de problemas. El ambiente laboral mejora y, por ende, disminuye la posibilidad de sufrir estrés o ansiedad a causa del trabajo.

Técnicas de coaching empresarial

1. Cuestionario previo

Al iniciar una sesión de coaching, deja que los participantes rellenen un breve cuestionario. En dicho documento se repasa el progreso y los éxitos alcanzados desde la última sesión. Se identifican los obstáculos y los aspectos que hay que mejorar en las siguientes sesiones. Las respuestas se pueden poner en común y ser utilizadas como punto de partida en otras sesiones.

2. Establecer objetivos SMART

Tenemos que establecer objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y en correlación con el tiempo disponible. Esta técnica permite organizar los objetivos y otorgar el tiempo y los recursos adecuados a cada uno de ellos.

3. Compartir es vivir

Si se ha tenido un éxito o se ha aprendido una lección, es muy importante que los participantes escriban y compartan sus sensaciones y opinión al respecto. Esto les ayudará a ver el valor de sus acciones y a ponerse en marcha para la siguiente ocasión, ya que mejora su motivación.

4. Las preguntas, siempre abiertas

Una de las técnicas del coaching más utilizadas es lanzar preguntas abiertas a los participantes. El coachee se puede expresar sin tapujos y su actitud y sus emociones se ven reflejadas en su discurso. Asimismo, al realizar una pregunta abierta, puede reflexionar acerca de la respuesta y las diversas alternativas. Esto permite, además, que el coach conozca mejor a sus clientes.

5. Escribir para conocerse mejor

Escribir nuestras metas y objetivos es un gran paso para identificarlos de forma detallada y poder actuar en consecuencia. También permite hacer un seguimiento del progreso e iniciar un diálogo interior. La escritura mejora el poder de observación y el enfoque de la persona.

6. Monitorizar el progreso

Es imprescindible realizar un seguimiento de las sesiones y de los progresos obtenidos. Los cuestionarios comentados anteriormente, así como escribir, son dos herramientas que nos ayudarán a identificar lo positivo y lo negativo de cada sesión, así como el desempeño en el día a día. Además, ayuda a que los participantes tengan en mente sus objetivos iniciales. Por otro lado, también se puede elaborar un diario donde los participantes escriban diariamente sus emociones, experiencias, observaciones o los desafíos personales.